Mendoza, ubicada al pie de la majestuosa Cordillera de los Andes, es una de las provincias más encantadoras de Argentina. Conocida mundialmente por sus vinos Malbec, ofrece una combinación perfecta de paisajes naturales, cultura, gastronomía y aventura. En este artículo, exploraremos los principales atractivos turísticos de Mendoza, cómo llegar desde Buenos Aires, detalles sobre cada lugar (incluyendo precios y horarios), y consejos prácticos para planificar tu recorrido, incluyendo la recomendación de utilizar Tripwip para alquilar un auto y facilitar tus desplazamientos.
Existen varias opciones para viajar desde Buenos Aires a Mendoza:
El Parque Provincial Aconcagua es un tesoro natural de escala continental. Alberga al imponente Cerro Aconcagua, que con sus 6.962 metros sobre el nivel del mar, es la montaña más alta del hemisferio occidental. Es un lugar que transmite respeto y admiración, ideal tanto para montañistas profesionales como para caminantes curiosos que solo quieren sentirse parte de un entorno majestuoso.
Dentro del parque se pueden realizar diferentes actividades según tu nivel físico: desde la Laguna Horcones —una caminata de baja dificultad que en menos de una hora te regala una vista impresionante del Aconcagua reflejado en el agua— hasta trekking de media y alta montaña con campamentos.
Además de la geografía, el parque es hogar de guanacos, cóndores, zorros andinos y una flora típica del paisaje de altura. Es importante llevar protector solar, abrigo, agua y calzado técnico.
El Valle de Uco no es solo una zona de bodegas: es una experiencia sensorial. A 1.200 metros de altitud, esta región combina viñedos infinitos, montañas nevadas como telón de fondo y una gastronomía de primer nivel que marida perfectamente con sus famosos vinos, especialmente el Malbec.
Las bodegas más reconocidas como Salentein, Andeluna, Zuccardi Valle de Uco, Domaine Bousquet, entre otras, ofrecen visitas guiadas con degustaciones, almuerzos gourmet y hasta hospedaje boutique. Algunas incluso incluyen experiencias como blending games (crear tu propio vino), catas a ciegas o recorridos en bicicleta por los viñedos.
Es un sitio perfecto para una escapada romántica, una salida con amigos o un día de lujo. El entorno natural del valle —con su luz particular, su aire puro y sus colores intensos— convierte cada momento en postal.
Las Termas de Cacheuta son sinónimo de relax en plena montaña. Este complejo termal, ubicado a orillas del río Mendoza, cuenta con piletas naturales de diferentes temperaturas, saunas, duchas escocesas y circuitos de hidroterapia, todo enmarcado en un paisaje serrano que potencia el efecto relajante.
Las aguas termales emergen de forma natural con propiedades minerales, ideales para combatir el estrés, mejorar la circulación y relajar los músculos. El complejo principal, Hotel & Spa Termas Cacheuta, cuenta con un parque de agua termal al aire libre y un sector de spa con tratamientos faciales y corporales.
Hay opciones tanto para pasar el día como para hospedarse. También existe un parque acuático más familiar, ideal si viajás con niños.
La capital provincial no se queda atrás en encanto. Con sus calles arboladas, acequias coloniales y su equilibrio entre lo moderno y lo tradicional, Mendoza ciudad es perfecta para disfrutar a pie, conociendo su historia y vibrando con su vida cultural.
El Parque General San Martín —con más de 300 hectáreas— es uno de los más bellos del país. En él se encuentra el Cerro de la Gloria, con su icónico monumento al Ejército de los Andes, desde donde se tiene una vista panorámica de toda la ciudad.
También podés visitar la Plaza Independencia, el Teatro Independencia, los mercados gastronómicos como el de Arístides Villanueva, y disfrutar de la excelente cocina local con platos como chivo, empanadas mendocinas o pastas caseras.
El Cañón del Atuel, ubicado en el departamento de San Rafael, es uno de los paisajes más impactantes de Mendoza. Se trata de una quebrada profunda esculpida por el río Atuel durante millones de años, generando formaciones rocosas únicas, cada una con su nombre y forma particular (El Fantasma, El Mendigo, Los Jardines Colgantes).
Este sitio es perfecto para los amantes del turismo aventura. Se puede hacer rafting, kayak, tirolesa, escalada, senderismo y ciclismo de montaña. También es ideal para quienes quieren simplemente recorrer en auto y detenerse a sacar fotos en los diferentes miradores.
El Puente del Inca es una formación natural increíble: un puente de roca travertina que se formó por la acción de las aguas termales ricas en minerales, que durante siglos modelaron el paisaje de forma artística.
Es Patrimonio Cultural de la Humanidad y está cargado de historia: allí se encuentra una vieja construcción abandonada que alguna vez fue un hotel termal de lujo en la década de 1920. Hoy solo se conserva su esqueleto, lo que le suma un toque nostálgico al sitio.
Las tonalidades ocres, amarillas y anaranjadas del puente, junto al paisaje montañoso que lo rodea, lo convierten en un lugar único para visitar y fotografiar.
El Parque General San Martín es un verdadero pulmón verde en el centro de la ciudad, pero más que eso: es uno de los parques urbanos más emblemáticos de Argentina. Fue diseñado por el paisajista Carlos Thays e inaugurado en 1896.
Cuenta con lagos artificiales, senderos, esculturas, un rosedal, el estadio Malvinas Argentinas y el acceso al Cerro de la Gloria, donde se encuentra el monumento al General San Martín. Es un sitio ideal para caminar, hacer picnic, andar en bicicleta, remar o simplemente descansar bajo la sombra de sus más de 300 especies de árboles.
Mendoza es un destino que combina naturaleza, cultura y aventura. Desde sus imponentes montañas hasta sus reconocidas bodegas, ofrece experiencias para todos los gustos. Planificar tu viaje con anticipación y contar con un medio de transporte propio, como un auto alquilado a través de Tripwip, te permitirá disfrutar al máximo de todo lo que esta hermosa provincia tiene para ofrecer.
La mejor época para viajar a Mendoza depende del tipo de experiencia que estés buscando. Si tu prioridad son los viñedos y la vendimia, entonces los meses ideales son de febrero a abril, cuando se realiza la cosecha de uva y muchas bodegas celebran eventos especiales. Además, durante marzo tiene lugar la famosa Fiesta Nacional de la Vendimia, uno de los festivales más importantes de Argentina.
Para quienes prefieren disfrutar de paisajes más verdes y un clima templado, la primavera (septiembre a noviembre) es perfecta. Las temperaturas son agradables, hay menos turistas y es ideal para actividades al aire libre como trekking o recorridos en bicicleta.
Si tu objetivo es disfrutar de la nieve y los deportes de invierno, entonces el mejor momento es entre junio y agosto, cuando el centro de esquí Penitentes (y otros más cercanos) están operativos.
Si bien en la ciudad de Mendoza podés moverte en transporte público o apps de movilidad, alquilar un auto es altamente recomendable si querés explorar la provincia a fondo. Muchos de los lugares más espectaculares —como el Valle de Uco, el Cañón del Atuel o el Parque Provincial Aconcagua— están ubicados a varias horas de la ciudad y no siempre hay transporte directo.
Al tener un auto, podés recorrer las bodegas a tu ritmo, parar en miradores, hacer rutas panorámicas como la RP 82 o la RN 7, y aprovechar mucho mejor el tiempo. Plataformas como Tripwip te permiten alquilar vehículos fácilmente, con opciones económicas y entrega en aeropuerto o alojamiento.
Además, para circuitos como el Camino del Vino o excursiones de día completo, el auto se vuelve una inversión que mejora significativamente tu experiencia.
En general, no se recomienda visitar bodegas sin reserva previa, especialmente si estás interesado en una experiencia guiada con degustaciones o almuerzos. Las bodegas más reconocidas (como Catena Zapata, Salentein, Andeluna o Zuccardi) trabajan con cupos limitados y horarios establecidos, por lo que es muy común que estén completas si llegás sin turno.
La mayoría permite reservar por WhatsApp, mail o directamente desde sus sitios web. Algunas también ofrecen experiencias personalizadas si se reserva con anticipación, como visitas privadas, catas verticales o blendings.
En temporada baja es posible encontrar disponibilidad espontánea en bodegas más pequeñas, pero si viajás en vendimia, fines de semana largos o vacaciones, reservar con 3 a 7 días de antelación es clave.
¡Sí, y muchas! Mendoza es uno de los destinos más importantes del país para el turismo activo y de aventura. Algunas de las actividades más populares incluyen:
También hay propuestas más tranquilas como paseos en kayak en embalses, senderismo fotográfico o experiencias slow travel combinadas con gastronomía. Sea cual sea tu nivel físico o tu perfil, hay propuestas para todos los gustos.
Sí, Mendoza es una de las provincias más seguras de Argentina para el turismo. La ciudad capital es muy transitada, especialmente en zonas turísticas como el Parque General San Martín, la calle Arístides Villanueva y las áreas céntricas. En pueblos del interior como Tunuyán, Tupungato o San Rafael, el ambiente es incluso más tranquilo y hospitalario.
Como en todo destino, se recomienda mantener precauciones básicas, como no dejar pertenencias visibles en autos alquilados, evitar caminar por zonas solitarias de noche y usar transporte seguro (como taxis registrados o autos de app).
En rutas turísticas, las condiciones suelen ser buenas, pero si vas a zonas más alejadas como la RN 7 hacia la Cordillera, es fundamental chequear el estado del clima y llevar abrigo, ya que puede haber nieve o vientos fuertes, incluso fuera del invierno.